Un cuento musical: Pedro y el lobo, I

¿A qué niño no le gustan los cuentos? A continuación os propongo un cuento musical para que podáis utilizar en clase. A vuestros alumnos les encantará.

Se trata del cuento ruso “Pedro y el Lobo”, y, para poder utilizarlo de forma eficaz, lo he dividido en cuatro partes: 

1. En la primera se hará una lectura del cuento y se pasará inmediatamente a la audición a través de la película.
2. A continuación, en la segunda parte, se tratará de trabajar lo aprendido a través de unas fichas de trabajo.
3. En la tercera, nos pondremos manos a la obra, y pasaremos a la instrumentación. Primero realizaremos unos ejercicios de prosodia rítmica con frases alusivas al cuento, y utilizaremos para ello el propio cuerpo. Después cantaremos la cancion “Ron,ron,ron”.
4. Ya por último, en la cuarta parte, pasaremos a la parte más divertida, a la acción. A través de una serie de ejercicios de movimiento y dramatización vuestros alumnos se lo pasarán en grande mientras aprenden jugando. Os recomiendo terminar esta parte con un ejercicio de relajación, donde por supuesto se volverá a escuchar de forma activa la música… y donde os aseguro que los niños podrán escenificar mentalmente todo lo vivido.

Vamos allá:

PRIMERA PARTE.

Primeramente haremos la lectura del cuento, de forma que mientras lo contamos los niños puedan imaginarse visualmente las imágenes, pero sin ninguna interferencia. Es el momento de la imaginación.

Más tarde les daremos el soporte de la película para que ya materialicen en imágenes el cuento. Será el momento para que abran los oídos a la maravillosa música de Prokofiev.

Pedro y el Lobo”, que sirvió de inspiración a Prokofiev. Este compositor, atraído por la música dedicada a los jóvenes y a los niños, se inspiró en la popular narración rusa mencionada.

En su plasmación musical, utilizó las características tímbricas de unos determinados instrumentos para describer musicalmente a sus personajes, Como os decía en la presentación, nos vamos a inspirar en el cuento de “mientras un narrador desentraña ia imagen musical.

1. LEEMOS EL CUENTO A LOS NIÑOS.

Pedro es un niño un poco travieso que vive en el campo con su abuelo. Sus amigos son tres animales: el pájaro, el pato y el gato. El pato se escapa, casi lo coge el gato. Un lobo intenta atrapar al gato, que se sube a un árbol. Pedro sube al árbol con una cuerda y consigue atrapar al lobo con la ayuda de un pájaro, que lo entretiene. Intervienen entonces los cazadores y el abuelo de Pedro. Pedro se ha convertido en una especie de héroe del pueblo.

Vemos la película “Pedro y el Lobo”.  

Vídeo: Pedro y el Lobo. 

Walt Disney. Colección Miniclásicos.

2. AUDICIÓN.

Antes de la audición, percibiremos cómo van creciendo en intensidad los instrumentos en función de la acción; advertimos el parecido entre el pájaro y la flauta, y los timbales y el bombo, y notaremos la agilidad de las melodías del clarinete, que suben y bajan o dan grandes saltos, y la gravedad del fagot. Igualmente señalaremos cómo un mismo instrumento no toca siempre el mismo tema, porque Prokofiev identifica los personajes con el timbre, y no con otros aspectos del sonido.

Ahora, escucharemos atentamente todos los instrumentos que representan los personajes.

!!PRESTAR MUCHA ATENCIÓN!!

·        Pedro: violines.

·        Abuelo: fagot.

·        Lobo: trompas

·        Pájaro: flauta

·        Pato: oboe

·        Gato: clarinete

·        Cazadores: timbales y bombo

Discografía: "Pedro y el Lobo", Op. 67. Prokofiev.

Orquesta de París. Director: Lorin Maazel.

Deutsche Grammophon.